En dos pasos, desde 69 hasta 100 °F

En la incubadora, el flujo de aire uniforme proporciona un calentamiento gradual de los huevos. HatchTech realiza un primer calentamiento durante un período de cinco horas, desde 69 a 85 °F, al que le sigue otro período de cinco horas, en el que los huevos se calientan desde 85 hasta 100 °F. Este es un concepto único en el mundo. Para ello es crucial el Uniform Embryo Activator (UEA).

Basándose en sensores, el UEA se encarga de que en la incubadora el flujo de aire sea tal que los huevos se calienten por igual, en todas partes. Además, el UEA garantiza un aumento ideal de la temperatura de los huevos, en forma lineal. Ello contrasta con una técnica ampliamente utilizada en la que se lleva la temperatura de la incubadora, lo más rápidamente posible, a la temperatura de incubación deseada.

Pruebas en las que se compararon los dos perfiles de precalentamiento, han demostrado que la técnica de HatchTech conduce a una media de un 1,0% más de huevos eclosionados, en madres de todas las edades. Una diferencia significativa en cuanto al rendimiento y al resultado.

El balance de la energía es crucial para el desarrollo

 Durante el almacenamiento, los huevos tienen una temperatura de 69 °F, lo que mantiene el metabolismo a un nivel bajo. Durante el almacenamiento, en el huevo siempre hay mortalidad de células. La eliminación de estas células requiere energía. El embrión no puede utilizar esta energía para su desarrollo. Por otra parte, la baja temperatura proporciona un bajo suministro de nueva energía. Un calentamiento rápido en la incubadora requiere un rápido desarrollo del embrión. La energía necesaria para ello está en forma limitada.

La puesta en marcha del metabolismo en el embrión toma tiempo. El calentamiento gradual de los huevos, con el concepto único de HatchTech, satisface esa demanda. De modo que habrá una mejor distribución de la energía entre la eliminación de las células muertas y el desarrollo del embrión. La gradualidad tiene como resultado una mayoreclosión de huevos.

Menor mortalidad de pollitos

Más huevos eclosionados significa beneficio, pero ello todavía no dice nada sobre la buena calidad de los pollitos. HatchTech apunta a esa buena calidad. Por lo tanto, estamos investigando si el calentamiento aún más lento en la segunda fase (85-100 °F) tiene un impacto en la tasa de supervivencia de los pollitos. Observamos, por ejemplo, la calidad del ombligo. Un mayor número de ombligos cerrados en la última fase de la incubación conduce a una menor mortalidad de pollitos en la primera semana. En un ombligo que no está cerrado, las bacterias tienen más oportunidades de entrar en el cuerpo. Con más gradualidad aún, HatchTech prioriza una mayor uniformidad en los pollitos.

Orgullosa de mi trabajo

"Cuando estudiaba en Wageningen, Países Bajos, mi atención estaba centrada solo en la ganadería. Recién al final de mis estudios entré en contacto con la avicultura. Cuando empecé a profundizar en el tema y comencé a aprender acerca de los procesos de incubación ¡me pareció muy interesante! Gracias a mi nuevo interés en el proceso de incubación, he acabado trabajando en HatchTech. Todavía me resulta extraordinario que un hermoso pollito de color amarillo se origina a partir de un pequeño grupo de células, en tan solo tres semanas. A veces, la industria avícola es, al menos en los Países Bajos, un tema de debate. En HatchTech tratamos de crear soluciones innovadoras en las que la calidad y el bienestar de los pollitos están en primer lugar, y ello me llena de orgullo".

Tremendamente complejo

"¡Todavía queda mucho por descubrir! El origen de los pollitos parece algo simple, pero en realidad es un proceso tremendamente complejo que puede ser afectado por más de mil factores diferentes. Todavía hay mucho por saber, y hay aún mucho por mejorar. La cultura empresarial de HatchTech también me atrae —es una empresa innovadora, y eres libre de profundizar en los temas que te parecen interesantes. Casi no hay límites en ello".